Apuntaciones criticas sobre el lenguaje bogotano: con frecuente referencia al de los paises de Hispano-AmericaCamacho Roldán & Tamayo, 1907 - 692 من الصفحات |
طبعات أخرى - عرض جميع المقتطفات
SPA-APUNTACIONES CRITICAS SOBR <span dir=ltr>Rufino Jose 1844-1911 Cuervo</span> لا تتوفر معاينة - 2016 |
عبارات ومصطلحات مألوفة
Academia acento acepción acto adjetivo América Angel de Saavedra antiguo aplica Bello Bibl Bogotá Bretón buen caballo Calderón canto castellano Castillo de Bellver Cervantes ción Colombia común consonantes CUERVO debe decir denotar Dicc Diccionario Diccionario de Autoridades dice dijo diptongo edición ejemplos empleo Epist escribe escritores esdrújulos España españoles etimología Fernán Caballero francés frase gerundio Gram Gramática griego habla halla Hartzenbusch hemos Hist Indias inflexiones item jorn Jovellanos latín lengua Lenguaje bogotano León libro llama Lope Madrid menester modo Moratin mundo Musa II nombre Obras Oviedo pág palabra parece pasaje paso persona plural poner preposición primera pronombres pronunciación Quevedo Quij Quijote Quintana Rivad Saavedra sale semejante sentido siglo siglo XVI significa significado siguiente sílaba sinéresis sufijo sustantivo Tirso Tirso de Molina tomo trae usado Valbuena Véase verbo verso VIII vocales voces vulgo XVII
مقاطع مشهورة
الصفحة 423 - Amarrado al duro banco de una galera turquesca, ambas manos en el remo y ambos ojos en la tierra, un forzado de Dragut en la playa de Marbella se quejaba al ronco son del remo y de la cadena: "¡Oh sagrado mar de España, famosa playa serena, teatro donde se han hecho cien mil navales tragedias!
الصفحة 638 - No hay sombras para ti. Como el cocuyo el genio tuyo ostenta su fanal; y huyendo de la luz, la luz llevando, sigue alumbrando las mismas sombras que buscando va.
الصفحة 197 - ¿No ves cuando acontece turbarse el aire todo en el verano? el día se ennegrece, sopla el gallego insano, y sube hasta el cielo el polvo vano. Y entre las nubes mueve su carro Dios ligero y reluciente horrible son conmueve, relumbra fuego ardiente, treme la tierra, humíllase la gente. La lluvia baña el techo, envían largos ríos los collados; su trabajo deshecho, los campos anegados miran los labradores espantados.
الصفحة 230 - ¿Y eres tú el que velando la excelsa majestad en nube ardiente, fulminaste en Siná? Y el impío bando, que eleva contra ti la osada frente, ¿es el que oyó medroso de tu rayo el estruendo fragoroso? Mas ora abandonado, ¡ay!, pendes sobre el Gólgota, y al cielo alzas gimiendo el rostro lastimado.
الصفحة 218 - ... -Si estos preceptos y estas reglas sigues, Sancho, serán luengos tus días, tu fama será eterna, tus premios colmados, tu felicidad indecible, casarás tus hijos como quisieres, títulos tendrán ellos y tus nietos, vivirás en paz y beneplácito de las gentes y en los últimos pasos de la vida te alcanzará el de la muerte en vejez suave y madura y cerrarán tus ojos las tiernas y delicadas manos de tus terceros netezuelos.
الصفحة 20 - Tú das la caña hermosa, de do la miel se acendra, por quien desdeña el mundo los panales. Tú en urnas de coral cuajas la almendra que en la espumante jicara rebosa; bulle carmín viviente en tus nopales, que afrenta fuera al múrice de Tiro; y de tu añil la tinta generosa émula es de la lumbre del zafiro.
الصفحة ii - ... hogar; un cantarcillo popular evoca la imagen de alegres fiestas, y un himno guerrero la de gloriosas victorias ; en una tierra extraña, aunque halláramos campos iguales a aquellos en que jugábamos de niños, y viéramos allí casas como...
الصفحة 19 - Que no le enturbia el pecho de los soberbios grandes el estado, ni del dorado techo se admira, fabricado del sabio moro, en jaspes sustentado. No cura si la fama canta con voz su nombre pregonera, ni cura si encarama la lengua lisonjera lo que condena la verdad sincera.
الصفحة 15 - La planta con ilustre señorío Ofrece de su tronco y de sus flores, Y de su hojoso toldo y fruto opimo Olor y dulce arrimo, Sustento y sombra a ovejas y pastores...
الصفحة 387 - Por entre dos altísimos ejidos la esposa de Titón ya parecía, los dorados cabellos esparcidos que de la fresca helada sacudía, con que a los mustios prados florecidos con el húmido humor reverdecía, y quedaba engastado así en las flores, cual perlas entre piedras de colores.